Cuando se hunde el barco

Esta mañana escuché a T.D.Jakes decir que un barco no se hunde porque está rodeado de agua, si no por el agua que tiene adentro. Es lógico y es poderoso.

La mayor parte de lo que pensamos de nosotros mismos surge por lo que otros nos han dicho. Una mujer que se cree fea escuchó esa opinión de boca de alguien a quien amaba. Un adolescente que piensa que es “bruto” y “bueno para nada” le creyó a algún adulto que no supo medir sus palabras. Una persona que se describe como “enfermiza”, formuló esa idea basándose en lo que alguien dijo.

No son las condiciones que nos rodean las que obstaculizan nuestro progreso y nuestro crecimiento personal. Las ideas negativas que tenemos sobre nosotros mismos son nuestro mayor impedimento. En otras palabras, la falta de prosperidad en tu vida no es porque naciste en un barrio pobre, o porque eres de tez muy oscura, o porque eres mujer, o porque eres gordo, feo, bocacho o bizco. Tu mayor obstáculo está en tu mente– es lo que te dices a ti mismo.

Esas palabras negativas que usas para definir quién eres son como el agua dentro del barco; te hunden.

Comentarios
Cuando se hunde el barco